Jesús está pasando por aquí





Marzo 4 de 2016

Jesús está pasando por aquí


En la mañana del 4 de marzo de 2016 cuando me dirigía a la cocina a tomar agua, empecé a cantar la canción “Jesús está pasando por aquí” y fue entonces cuando experimenté la sensación de la presencia del señor en mi vida, es Jesús en mí. Mientras caminaba y cantaba “Jesús está pasando por aquí”, Jesús me anunciaba su presencia que está vivo, él está en nosotros y cada paso que damos él está presente hoy y siempre. Sentí que en ese momento el caminaba y continúa caminado a mi lado, a nuestro lado, el recorre nuestra vida, nuestro hogar, todo lo que somos. Jesús está pasando, así que seguí y sigo cantando recorriendo cada rincón del apartamento de mi vida, de mi presente, donde me encuentro, cantando “Jesús está pasando por aquí.”

Este ejercicio me invita a cantarlo, a proclamarle, a vivirlo, a sentirlo vivo en mi vida todos los días. Este ejercicio nos permite viajar, recorrer con el señor todos nuestros caminos, sintiendo de corazón su presencia.  Él también me inspira en este momento para redactar cada palabra.

Que alegría tener, sentir a Jesús en nuestro hogar, en nuestro sentir. Su confirmación, su presencia, su alegría, protección, dirección, luz, consejo, amor, abrigo, sabiduría. Que alegría poder contar con Jesús, decirle lo que pienso, siento, anhelo, proyectos, trabajo, familia. 

Que privilegio, que maravilla dejar que Jesús actúe, viva y permanezca en nosotros y con nosotros.
Jesús está aquí para liberar, para sanar, para acompañarnos, para aconsejarnos, para ser la luz, nuestro sustento, refugio, abrigo, protección, alimento de vida, alegría, felicidad, dicha.



“Jesús está pasando por aquí
Jesús está pasando por aquí
Y cuando él pasa todo se transforma
Se va la tristeza, llega la alegría
Llega la alegría para ti y para mi

Ahora mismo señor, ahora mismo
Yo te pido que rompas las cadenas
(resentimiento, ira, egoísmo, venganza,
envidia, impaciencia, mentira, dolor,
oscuridad, maldad) y que las puertas
del cielo sean abiertas y que en virtud
mi alma será llena de tu presencia Señor”



Liliana A Monroy Pacheco

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