Reflexión de los Misterios Gozosos
Septiembre 6 de 2014
La Visitación
Lo observo desde la acción de María en Dos Formas
La Primera de ellas, comunicar a su
Prima Isabel, la obra de Dios en su vida. Ser portadora de las
bienaventuranzas, de la confesión y testimonio de lo que Dios ha hecho en ella.
Llevar con alegría la obra de Dios. Ella es portadora del mensaje y nos
presenta a su Hijo Jesús. María es el camino a Jesús.
La segunda acción de María, es visitarnos como lo hizo con Isabel para
compartirnos el gozo de la obra de Dios y su maternal cuidado. María acompaño y cuido a Isabel durante el embarazo. Así es nuestra madre María
con cada uno de nosotros, ella nos visita para quedarse con nosotros y
mostrarnos a su amado hijo en el cuidado, la protección y amor de una madre.
Todos somos bienaventurados porque permanentemente
estamos recibiendo mensajes de reflexión, luz, confianza, esperanza, paz,
amor y todo aquello que nos da entendimiento y herramientas para
nuestro diario caminar.
Comprender y aceptar el mensaje, es mirar la respuesta
de María cuando decía al ángel de señor “hágase en mí según tu palabra”. Aquí
es cuando acogemos a Jesús en nuestra vida, cuando nos disponemos a recibir la
luz, el entendimiento, amor y las virtudes de la felicidad y la divinidad.
Como portadores de este regalo, estamos invitados a gozar esta bienaventuranza en nuestra vida y llevarla a los demás.
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