Tu vara y tu callado me infundirán aliento

Mayo 9 de 2016

Tu vara y tu callado me infundirán aliento

Señor de paz, tu vara y tu callado me infunden aliento. El sábado 7 de mayo de 2016, desperté con una sensación de inquietud, mi corazón se sentía agitado, sentía que me faltaba fuerza. Era un gran día en el señor, ya que para este día iniciaría una brigada de limpieza por el rio Gaira donde participaríamos muchos corazones por la limpieza y recuperación de 500 metros del rio Gaira su desembocadura, orillas y playa vecina. Necesitaba fuerzas y vitalidad para este gran día de limpieza. De esta manera cerré mis ojos y mientras me arreglaba le decía a Dios padre que me diera el equilibrio, la fuerza, fortaleza, vitalidad, energía, armonía, paz. Fue entonces cuando llego la palabra de mi padre con fuerza y poder diciéndome “Tu vara y tu callado me infundirán aliento” lo repetí y lo sigo repitiendo, porque Dios padre creador es mi vara y mi callado y mi aliento, es Dios padre que infunde en mi vida el aliento, la fuerza, la vitalidad que necesito. Empecé a recobrar el aliento, la energía, la fuerza, Dios padre está conmigo, no temo, porque él es mi padre que me rescata, alivia, sana, abriga, ama.  

En el ejercicio de limpieza del rio Gaira, ayudaron muchas manos, todos éramos unidad, energía, trabajando por un solo objetivo colectivo, limpiar, cuidar, proteger, recuperar los primeros 500 metros de la desembocadura del rio Gaira. Así mismo es Dios padre en nuestra vida, no estamos solos, somos su creación, su objetivo de amar de cuidar, de limpiar, de transformar. No estamos solos tenemos un Dios creador que nos ama y nos cuida infinitamente, gritamos y él nos escucha, sale al encuentro, nos cuida, limpia, sana, renueva, nos llena de su amor, cuidado y protección.

Te amo Dios padre creador, te amo en toda tu forma y en la representación del todo lo visible e invisible, eres todo señor, estamos inmersos en ti, somos tuyos señor. Eres mi salvador, mi esperanza, mi confianza. Eres señor mi vara y mi callado que infunde en mí el aliento.

Recuerdo estar sobre el rio en una canoa con pescadores recogiendo la basura de la superficie del rio, y debo confesar que mientras estaba allí a pesar de la contaminación, sentí por primera vez en mi vida una paz diferente a cualquier otra paz que he experimentado, era una paz que serenaba mi alma, corazón, sentía una conexión con la naturaleza y en ese momento experimente una paz total, la paz que proviene de Dios, que no busca intereses de ningún tipo.  Dios nos protege, como dice el salmo 23, aunque ande en valle de sombra, no temeré mal alguno porque Dios padre está conmigo. Así lo ha hecho siempre todos los días de mi vida, ya que estoy cubierta por la gracia de Dios padre y ningún virus me afectará ni me afecto el día de la limpieza del Rio Gaira. Por que como tú lo has dicho en tu palabra del salmo 23,

Aunque ande en valle de sombra

De muerte

No temeré mal alguno,

Porque tu señor estarás conmigo;

Tu vara y tu callado me infundirán aliento

El Rìo y la Naturaleza y todos somos uno, soy de Jesús, soy de la naturaleza, soy de Dios Creador.  

Hoy 9 de mayo de 2016 repasando el salmo 23, Jehová es mi Pastor, siento que me habla en cada versículo y cada palabra la vivo en mi presente, la he vivido en mi pasado, la contemplé y la sentí con fuerza el día sábado 7 de mayo de 2016 y la sigo experimentando.

Comparto esta experiencia con todos los que leen estas palabras, no soy yo, es cristo que vive en mí.  Reciban estas palabras de fortaleza y este testimonio, porque Dios padre, hijo y espíritu Santo están con nosotros siempre.

Amen, Amen, Amen.

Gracias padre celestial por tus cuidados, amor, protección. Gracias porque eres mi pastor y nada me falta, nada me falta porque tú eres mi todo padre.

Dios padre nos recuerda esta oración de poder en su palabra, salmo 23, Jehová es mi Pastor

1, Jehová es mi pastor nada me faltará

2, en lugares de delicados pastos

Me hará descansar,

Junto a aguas de reposo me pastoreará

3, confortará mi alma.

Me guiara por sendas de justicia

Por amor de su nombre.

4, Aunque ande en valle de sombra

De muerte

No temeré mal alguno,

Porque tu señor estarás conmigo;

Tu vara y tu callado me infundirán aliento

5, Aderezas mesa delante de mi

En presencia de mis angustiadores;

Unges mi cabeza con aceite;

Mi copa está rebosando.

6, ciertamente,

El bien y la misericordia

me seguirán

Todos los días de mi vida

Y en la casa de Jehová

Morare por largos días.

Salmo 30, Acción de gracias por haber sido salvado de la muerte

1, Te glorificaré, Jehová

2, Porque a ti clame y me sanaste

Me liberaste, me aliviaste.

Aleluya, Aleluya, Aleluya, gracias señor Dios padre.

Te entrego mi interés individual y me ofrezco total señor a ti y abro mi corazón en el amor y la unidad global.

Liliana Alejandra Monroy Pacheco