Invitación a contemplar a San José para acoger a María y recibir a Jesús en nuestra vida



Santa Marta, noviembre 21 de 2017


Reflexión: Evangelio Según San Mateo Capitulo 1, versículos del 18 al 25





José asume la paternidad legal de Jesús,

En varias oportunidades había leído y escuchado este texto, Evangelio Según San Mateo Capitulo 1, versículos del 18 al 25, José asume la paternidad legal de Jesús; pero hoy por la gracia del Espíritu Santo el señor nos concede la gracia de contemplarlo con otra mirada y profundidad. 

Tres enseñanzas:

   1. Hoy el Espíritu Santo nos invita como lo hizo con José a no repudiar, a no despreciar, como lo veremos a continuación en los versículos siguientes del 20 al 25

   
    2. Los dos versículos del 21 al 23 es una llamado a la conversión, el Señor nos invita a  confiar en Jesús a través de María con la ayuda del Espíritu Santo pues como lo ha anunciado el salvará a su pueblo de sus pecados, esto lo contemplamos en las faltas, falencias, inseguridades, temores traumas y todo aquello que necesita ser sanado, restaurado, perdonado.

   3. Concluimos con  el versículo 24 y 25: Despertándose José del sueño, hizo como el ángel del Señor le había mandado, y tomo consigo a su mujer. Estos dos versículos 24 y 25 son hermosos, en el sentido que José Despertó y obedeció el llamado del ángel y acepto a María. Hoy estamos invitados a despertar de nuestro sueño profundo del llamado que Dios nos hace cada mañana.

Lecturas y reflexiones:

   San Mateo Cap 1, 18: El origen de Jesucristo fue de esta manera: Su madre, María, estaba desposada con José y, antes de vivir ellos juntos, se encontró que estaba embarazada por obra del Espíritu Santo. 19. Su marido José, que era justo, pero no quería difamarla, resolvió repudiarla en privado.
Reflexión: Desde la actitud de José en este primer mensaje, detengámonos a reflexionar como cada uno de nosotros por nuestros propios pensamientos, interpretaciones, y modo de juzgar nos alejamos de nuestro prójimo por las razones que sean, cuantas veces resolvemos despreciar, repudiar porque nos dijeron, nos miraron, o porque el otro es diferente porque está en otros caminos, pensamientos, filosofías, creencias, partidos, etc.

Hoy el Espíritu Santo nos invita como lo hizo a José a no repudiar, a no despreciar, como lo veremos a continuación en los versículos siguientes del 20 al 25:

Hoy El Espíritu Santo te dice a ti y a mí: Así lo tenía planeado, cuando el ángel del Señor se le aprecio en sueños y le dijo: José, hoy te dice a ti y a mi Pablo, Juan, Diana, Liliana: “José, hijo de David, no temas tomar contigo a María tu mujer porque lo engendrado en ella es del Espíritu Santo”

Reflexión: Hoy el Señor, con su Espíritu Santo nos llama a cada uno y nos dice “No temas tomar contigo a María porque lo engendrado en ella del Espíritu Santo” Acojamos, recibamos a María en nuestra vida, en nuestro corazón, ella es la llena de gracia, la portadora del Espíritu Santo y quien nos lleva a Jesús. 

Cuando nuestros pensamientos nos incitan a despreciar o repudiar a nuestro prójimo, miremos a María, mira la estrella, invoca a María, ella nos llena del Espíritu Santo y nos muestra la misericordia el camino de oración por el otro, oremos por el otro, entreguemos a María el problema, la dificultad, el hermano más necesitado, el que no puede ver con los ojos del cuerpo y del alma, el que está enfermo, solo, triste, desamparado, el que está en tentación, el que nos ha hecho mal, el que está en otras direcciones diferentes a las de Dios, a los que no creen, no esperan y no aman. No despreciemos, no repudiemos en secreto estas almas y nuestra propia alma necesitada del auxilio del amor de Dios a través de María, portadora del Espíritu Santo y de nuestro señor Jesucristo. Es María nuestra madre, el refugio que Dios hoy nos entrega para que la llevemos con nosotros siempre.

Versiculo 21: Dará a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados” 22. Todo esto sucedió para que se cumpliese lo dicho por el Señor por medio del profeta:
23. “Ved que la virgen concebirá y dará a luz un hijo, y le pondrá por nombre Emmanuel, que traducido significa: Dios con nosotros.

Los dos versículos del 21 al 23 es una llamado a la conversión, el Señor nos invita a  confiar en Jesús a través de María con la ayuda del Espíritu Santo pues como lo ha anunciado el salvará a su pueblo de sus pecados, esto lo contemplamos en las faltas, falencias, inseguridades, temores traumas y todo aquello que necesita ser sanado, restaurado, perdonado: Hoy el señor nos invita a confiar plenamente en él, nuestras enfermedades, falta de trabajo, necesidades materiales y las del alma, hoy el señor te invita a ti y a mí a confiar que es Jesús nuestro salvador, él nos rescata de todos nuestros problemas, dificultades, él Señor ha venido a sanar a salvar nuestra vida presente y futura.

Que maravilloso alimento, en este pasaje está contemplada la gran promesa, invitación del Señor a confiar, a acoger a María, a recibir el Espíritu Santo que posa sobre ella y de esta manera recibir a nuestro Señor. Él hoy nos insiste y nos dice como le dijo a José a través del ángel, no temas, pues es Jesús nuestra salvación, él lo puede todo, es Jesús nuestro amigo sincero es con María que podemos alcanzar la asistencia divina, la protección, el amor más íntimo con Dios. La palabra salvar hace referencia a que nos salva de las angustias, de las tristezas, de la enfermedad de la indiferencia, de la ceguera física y espiritual, de la sordera de todo lo que nos impide vivir alegres en vida y para la eternidad, es Jesús quien nos salva de los tormentos y dificultades. 


Concluimos con  el versículo 24 y 25: Despertándose José del sueño, hizo como el ángel del Señor le había mandado, y tomo consigo a su mujer. 25. Y sin haber mantenido relaciones dio a luz un hijo, y le puso por nombre Jesús.

Estos dos versículos 24 y 25 son hermosos, en el sentido que Jose Desperto y obedecio el llamado del agel y acepto a Maria. Hoy estamos invitados a despertar de nuestro sueño profundo del llamdo que Dios nos hace cada mañana en contmeplar la hermosura de su creación , en el amar al prójimo, en despertar al perdón, la reconciliación, a regresar a los caminos del Señor. Pidamos a Santa Maria, a San Jose que oren por cada uno de nosotros para llegue el Espiritu Santo y nos despierte del sueño profundo y que nos haga obedientes al llamado de Dios para confiar, creer, esperar y hacer la voluntad de Dios.

Dios los bendiga y gracias Espíritu Santo por este mensaje maravilloso que hoy nos has traído para amar a María, recibirte y seguir a Jesús como lo hizo San José.




Liliana A Monroy Pacheco
Espíritu Santo

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