JUNIO 15 DE 2018
1 DE REYES 19, 11-12
La lectura de hoy nos
invita a cuatro reflexiones: Primero, “sal
y permanece de pie en el monte ante Yahvé”. Salir nos invita a dar el
primer paso para soltar todo aquello que nos hace daño y oscurece nuestro ser
interior para darle espacio a la luz, buscar y seguir la luz, que es Dios.
Segundo, “permanece de pie en el monte
ante Yahvé”, permanecer de pie es mantenerse, resistir, permanecer firmes
en la fe, la esperanza, la confianza en Dios para no desfallecer. Tercero, el monte ante Yahve nos invita a buscar
un lugar para la oración el dialogo personal con Dios. Cuarto, Entonces
Yahvé pasó y hubo un huracán tan violento que hendía las montañas y quebraba
las rocas ante Yahvé; pero en el huracán no estaba Yahvé. Dios pasa
por nuestras vidas, pero podemos estar atravesando momentos muy difíciles que
nos sacuden y estremecen.
El Señor le dice a
Elías y nos dice a cada uno de nosotros: “sal
y permanece de pie en el monte ante Yahvé " Entonces Yahvé pasó y hubo un huracán
tan violento que hendía las montañas y quebraba las rocas ante Yahvé; pero en
el huracán no estaba Yahvé. Después del huracán un terremoto; pero en el
terremoto no estaba Yahvé. Después del terremoto, fuego, pero en el fuego no
estaba Yahvé. Después del fuego, el susurro de una brisa suave.”
“Sal y permanece de pie en el monte ante Yahvé”: Salir nos indica
dar el primer paso, mirar hacia delante, ir al encuentro con Dios para sacar,
mostrar todo aquello que nos aqueja, duele, molesta, enfurece, preocupa, hace
daño. Permanecer, nos indica
firmeza, valor, fuerza, vigor, esperanza y confianza ante el Señor Yahvé en los
momentos difíciles de la vida. El monte,
nos invita a disponer un lugar, tiempo para el dialogo y encuentro personal con
el señor mediante la oración. Recordemos cuando Jesús se apartó a orar lo hizo
en el monte Tabor y en el monte de los Olivos, También lo hizo Moisés y en este
caso Elías con la instrucción y dirección del mismo Dios.
“Entonces Yahvé pasó y hubo un huracán tan violento que hendía
las montañas y quebraba las rocas ante Yahvé; pero en el huracán no estaba Yahvé”. Cuando nos disponemos a vivir
el encuentro con Dios en la oración, Dios pasa por nuestras vidas y en aquellos
momentos de nuestra vida podemos estar pasando por momentos difíciles de salud,
familiar, trabajo, decaimiento espiritual, vacíos, inseguridades, confusiones,
malestares, angustias, preocupaciones que son como huracanes, terremotos, fuego
que nos sacude. Pero es en estos momentos donde Dios nos impulsa a permanecer
de pie mediante la oración y la fe en Él.
Yahvé, nuestro padre y
Señor, nos invita a salir al encuentro, permanecer firmes en la fe y la confianza
en El en todas las situaciones de la vida, permanezcamos orantes. Busquemos
espacios de oración de recogimiento de dialogo con Dios para que el Señor pueda
pasar, sanar, liberar, enseñar, instruir, direccionar.
Inspiración y obra de Dios padre, hijo y Espíritu Santo
Liliana A Monroy Pacheco
Comentarios
Publicar un comentario